Tras cargar el coche con los chismes y los churros de turno, que con la tripa vacía se pesca muy mal, salimos sobre las 7 de la mañana en dirección al escenario, llegamos al sitio, montamos el equipo con los ojos como platos debido a que las carpas saltaban justo enfrente nuestro y muy cercanas a la orilla y comienzo de la pesca sobre las 9.
El embalse estaba un poco alto de nivel y el agua hacía un poco de tiro hacia la derecha, pero las condiciones de aire y temperatura eran perfectas para pescar.
Sobre 30 minutos después de empezar, tuvimos las primeras picadas, una cada uno, primero José que sacó una hermosa carpa de espejos y casi seguido le entró a Santi una preciosa carpa común, ambas rondando los dos kilos de peso cada una.
A partir de ahí la cosa fue un poco desigual, ya que a José se le paró completamente la pesca y Santi obtuvo otras cuatro capturas más, pero en el espacio de una hora, a partir de ahí el agua bajó muy repentina de nivel, se levantó aire y la cosa se quedó parada durante mas de una hora que no tuvimos ninguna picada, insistiendo con el recebo, y también debido a que el aire cesó, José pudo sacar tres carpas mas casi seguidas y Santi una y un par de ellas que se le desclavaron.
Ahí ya llegamos a la una del medio día, hora que nos habíamos marcado para terminar la pesca, con un balance de José 4 carpas que dieron un peso total de 5,800 Kg. y Santi 6 carpas que pesaron algo mas de 8 Kg.
Vuelta a casa con retención de tráfico incluida y a esperar a que la próxima salida sea al menos igual que esta.
